Se trata de una hipermelanosis adquirida. El melasma producido por los anticonceptivos orales es más resistente que el que se produce en el embarazo.
La melanina se produce en los melanocitos pero se almacena en las células del estrato corneo de la epidermis. Este pigmento se produce a partir de un aminoácido llamado tirosina. El estímulo lumínico da lugar a un oscurecimiento de la melanina.
La producción de melanina o melanogénesis se desencadena por la acción de los UVB, mediante una reacción inflamatoria, y otras situaciones inflamatorias pueden estimular también la síntesis de melanina.
El tratamiento del melasma debe ir encaminado a despigmentar o aclarar la piel y además evitar la síntesis de melanina.
Para despigmentar o aclarar la piel se hace una exfoliación de las capas epidérmicas cargadas de pigmento, y con esto conseguimos el aclaramiento del melasma. Usamos diferentes agentes para la exfoliación entre los que se encuentran el Resorcinol, el ácido salicílico, ácido tricloroacético, agentes fenolados o el ácido retinoico. Con este último debemos tener cuidado porque su uso continuado produce reacciones irritativas y esto puede desembocar en una pigmentación postinflamatoria. Los tratamientos con láser o luz pulsada intensa.
Para bloquear la síntesis de melanina se usa la hidroquinona que inhibe la tirosinasa y con esto la tirosina no puede pasar a melanina.
También son despigmentantes el ácido ascórbico, el ácido azelaico y el kójico.
El melasma puede ser epidérmico, con una distribución centro-facial y bordes bien delimitados, o dérmico con bordes más difusos y una distribución malar o mixto como ocurre la mayoría de las veces.
Para el diagnóstico y clasificación del melasma, usamos la luz de Wood, lámpara que emite luz a 365nm de longitud de onda. El melasma epidérmico es el que tiene mejor pronóstico de cara al tratamiento, y se oscurece con la luz de Wood, mientras que el dérmico se aclara.
Los tratamientos de los melasmas en pieles claras pueden ser mucho más agresivos porque no ocurren repigmentaciones postinflamatorias.
Las cremas de mantenimiento que se prescriben después de un peeling para la hipermelanosis facial se deben usar un mínimo de 3 meses. En pieles oscuras se recomienda no usar la hidroquinona a más del 2% de concentración por su poder irritativo.
