Evidencias científicas de los hilos de sustentación
Durante décadas el lifting quirúrgico ha sido el procedimiento de elección en el tratamiento de la ptosis facial y de cuello. Sin embargo, las intervenciones quirúrgicas deben lidiar con las posibles complicaciones: infección, necrosis de la piel, hematoma, seroma, y neuritis de las ramas del nervio facial. Además, cabe tener en cuenta los riesgos asociados a la anestesia general u otras formas de sedación. Todo ello sin mencionar que la visibilidad de las cicatrices precisa de un largo período de retiro de la vida socio-laboral.
En estos momentos crece la tendencia entre los pacientes a buscar resultados de alta calidad con tratamientos menos invasivos, de menor riesgo y con un período rápido de recuperación. Los pacientes prefieren obtener unos resultados más modestos a cambio de reducir los riesgos asociados a la cirugía.
Entre los procedimientos de rejuvenecimiento no quirúrgico tenemos las inyecciones de diversos geles para restaurar los volúmenes perdidos, lo que se conoce como rejuvenecimiento en 3D. Aunque si no se ejecutan con maestría pueden producir hinchazón y obtener un contorno poco natural de la cara, incluso desplazando hacia abajo el centro de gravedad del rostro y acentuando su caída.
De otra parte, los peelings químicos o los tratamientos con láseres fraccionales o no ablativos son capaces de obtener una notable mejoría cutánea, aunque no siempre se puede alcanzar un tensado eficaz junto a una elevación de los tejidos subyacentes.
Debido a lo anterior se imponen los tratamientos con hilos de sustentación o de tracción, capaces de obtener resultados de elevación de los tejidos de la cara, proporcionando mejor definición de la mandíbula y de la transición al cuello. En definitiva,los hilos de sustentación actuan como soporte eficaz para el resto de tratamientos, al tiempo que devuelven un aspecto más fresco y juvenil al rostro. Atención, porque no hablo de los tratamientos, tan de moda, basados en colocar y cruzar múltiples hilos que no ejercerán tracción alguna y que contribuyen a dar un aspecto más hinchado de la cara. Estoy hablando de los hilos de sustentación.
Hablo de hilos o suturas de sustentación que se colocan de forma estratégica en cara y/o cuello, contribuyendo de manera notable al remodelado facial con buena definición del contorno. Siguiendo a los autores americanos podemos hablar de este tratamiento como el “lunch-time lift”, es decir el lifting de la hora de comer. Pues en un tiempo relativamente breve se puede realizar este tratamiento solo con anestesia local. El paciente puede incorporarse de inmediato a su vida laboral y/o social, lo que es sumamente agradecido. Además, los efectos secundarios son escasos y de naturaleza leve, como demuestran las publicaciones realizadas, siendo la recuperación rápida.
Los resultados son inmediatos y naturales tras la colocación de los hilos, y se mantienen y/o potencian con el paso del tiempo. La composición de los hilos es de material reabsorbible, como ácido poliláctico, polipropileno o policaprolactona. Pero estos materiales son inductores de colágeno, es decir estimulan a los fibroblastos (células de la piel) para que fabriquen colágeno. De esta forma, el material se reabsorbe pero el nuevo colágeno permanece, haciendo que los resultados puedan ser duraderos en el tiempo, hasta 2 o más años
Dr. Justo M. Alcolea.
Barcelona
