¿Por qué acudir a un médico estético?

¿Por qué acudir a un médico estético?

Rostro mujer con marcas de médico estético para cirugía facialEl médico estético es el profesional adecuado para un diagnóstico de lo que está ocurriendo en el organismo. Es la persona adecuada para aconsejar y tratar en cuestiones de salud. La frase «La cara es el espejo del alma» se podría extrapolar perfectamente aquí.
Cuando una persona se da cuenta que se están produciendo cambios en su aspecto físico, corporal o facial, es porque hay cambios internos que se manifiestan en la «máscara» superficial, la piel. Esas alteraciones se deben en parte a la edad, a la genética, pero hay muchos que se deben a estilos de vida inadecuados. Se sabe que el envejecimiento es fisiológico,  aunque se puede acelerar o ralentizar con determinados hábitos de vida y con terapias médicas concretas.

 

No hay productos médico-estéticos universales

Se acude al especialista de medicina estética para que valore el conjunto de los cambios estéticos.  Pueden ser fisiológicos y genéticos o pueden ser acelerados. En ambos casos se tratarán con terapias externas y, en el segundo caso, se valorarán las terapias internas que son necesarias para cada paciente.

Cada vez es más conocida la forma de ayudar al envejecimiento desde la bioquímica. Hay algunos productos que ayudan a mejorar la imagen física y la calidad de vida.

Está muy de moda el colágeno, por ejemplo, pero no todos los disponibles en el mercado se absorben igual, no todos los pacientes toman únicamente este producto.  Se da en las dosis adecuadas a cada persona.

Los complementos nutricionales parece que sean inocuos porque son naturales, pero esto no es así.  En primer lugar tienen que ser efectivos y en segundo lugar no pueden provocar efectos secundarios. Para ello se necesita la dosis adecuada, según los años que se tenga, las patologías y los estilos de vida y se necesita también un producto de calidad. Se necesitan las formas químicas que mejor se adaptan al cuerpo humano y saber que no hay conservantes o tóxicos añadidos a ese producto. Un ejemplo muy típico son los omega 3, algunos de ellos cargados de mercurio y otros tóxicos.

Los médicos que nos dedicamos a la medicina antienvejecimiento y preventiva tenemos el compromiso de informarnos sobre la calidad de los nutrientes que estamos aconsejando a nuestros pacientes.

 

Dra. Consol Montilla